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miércoles, 12 de octubre de 2016

NUEVE MESES, NUEVE VALORES

Para mejorar la convivencia entre iguales hemos decidido incorporar dentro del Plan de Acción Tutorial una serie de actividades encaminadas a prevenir situaciones conflictivas, elaborando así el Programa "NUEVE MESES, NUEVE VALORES".

Con este Programas pretendemos fomentar en el alumnado valores como: el esfuerzo, la responsabilidad, la tolerancia, la amistad, el compañerismo, la empatía...


1.- OBJETIVOS

Los objetivos que queremos desarrollar en la Comunidad Educativa son los siguientes:

  • Implicar a las familias en la participación del Programa.
  • Los maestros/as, como animadores de la educación, ayudamos al alumnado a formar su personalidad y completar la acción educadora de padres/madres.
  • El centro debe ser agente mediador para intervenir e influenciar, hacer partícipes activos, los distintos ámbitos de influencia: padres/madres, instituciones, organizaciones...
2.- PROPUESTAS DE ACTIVIDADES

Cada mes se trabajará un valor previamente acordado por las Coordinadoras del proyecto de ambos centros. Al principio de cada mes se le dará a cada alumno/a un cuento relacionado con el valor a trabajar para dicho mes. Lo llevarán a casa para leerlo y debatirlo con sus padres/madres.

A final de mes los padres/madres voluntarios acudirán al Centro para realizar con el grupo-clase la actividad o actividades que hayan preparado con respecto al valor a trabajar. Para ello pueden utilizar distintos medios: manualidades, cuentos hechos por ellos, dramatizaciones, canciones, power points...


3.- OCTUBRE, MES DEL ESFUERZO PERSONAL



CUENTO A TRABAJAR 

EL PEOR PERRO GUARDIÁN DEL MUNDO


El peor perro guardián del mundo vigilaba un precioso palacete a las afueras de la ciudad. Se hizo famoso no porque no ladrara a los ladrones, que no lo hacía, sino porque, al ver a alguien con aspecto de delincuente, le abría la verja y le invitaba a pasar.


Así, con la ayuda de la oscuridad, casi todas las noches podía verse alguna sombra entrar al palacete y salir poco después cargada con sacos llenos de joyas y objetos de valor. El rumor de una casa llena de riquezas tan fácil de robar se extendió entre los ladrones de la zona, y estos incluso crearon un listado para reservar la fecha en que podría ir cada uno.

El encargado de hacer la lista y controlarla era Pocopaco, un joven ladrón con cara de tontorrón. No llevaba la lista por ser el jefe, claro, sino porque como después del robo cada ladrón desaparecía durante algún tiempo, solo podía llevarla el último en robar. Y ese puesto le había tocado a Pocopaco por ser el más tonto del grupo. Pero el pobre Pocopaco no le daba importancia y esperaba con ilusión el día en que le llegase el turno.

La noche en que por fin le tocaba robar a Pocopaco, este se acercó caminando al palacete, pero cuando se disponía a cruzar la puerta, por primera vez el peor perro guardián del mundo se puso a ladrar con fuerza.

- Está bien, está bien, Sansón. Esta noche me quedaré contigo y no saldré con ningún saco. Ya los hemos atrapado a todos.

Y es que Pocopaco no era ningún ladrón, y mucho menos tonto, sino el nuevo jefe de policía de la ciudad. Este, aprovechando que los ladrones se dedicaban a robar porque no querían esforzarse trabajando, les había tendido una trampa poniéndoles tan fácil robar aquella casa que no se habían podido resistir. Y cuando cada noche entraba un nuevo ladrón, pensando que iba a ser el robo más fácil de su vida, era detenido al instante por un montón de policías. Y al rato era el mismo Pocopaco quien salía de la casa cargado con el saco, haciendo creer a todos que el robo había sido un éxito y se habían escapado con el botín.

Y así fue, pasando una temporada en la cárcel, como aquellos ladrones descubrieron que cuanto mejor es algo, normalmente cuesta más esfuerzo conseguirlo, y no al revés.



 

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